Y para hacerlo nos hemos ido a la Finca de Los Llanos de Albacete y a la macrogranja porcina de Balsa de Ves, porque son dos ejemplos significativos de aprovechamientos que sobreexplotan y contaminan los acuíferos.

La finca de los Llanos devora más de la mitad del agua, que consume la propia ciudad de Albacete, y esto para beneficio de una única familia. Es uno de los muchos ejemplos de lo que llamamos “aguatenientes”, unos pocos privilegiados que depredan un recurso público como el agua, hasta dejar los acuíferos exangües.

El otro ejemplo, la macrogranja de cerdos de Balsa de Ves, que además de utilizar grandes cantidades de agua, la devuelve contaminada en forma de purines, con elementos nocivos como los nitratos u otros elementos que envenenan nuestros acuíferos.

Este es el actual modelo de gestión del agua de Castilla la Mancha, el modelo insostenible todavía anclado en el siglo pasado, que sobreexplota y contamina. Y que tiene sus consecuencias, en la degradación de todos ecosistemas acuáticos y la hipoteca a la que se condena a las generaciones futuras y también del presente, por el expolio actual del bien más valioso, el agua, elemento esencial para el mantenimiento de la vida.

Puedes ver el vídeo en el siguiente enlace: Botijos 2021-ACEM gestión de Recursos Hídricos

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