El informe Empleo y Transición Ecosocial, presentado el pasado julio por Ecologistas en Acción, Anticapitalistas y cinco sindicatos, demuestra que el cambio hacia una sociedad respetuosa con el medio ambiente y con la vida de las personas es solo cuestión de voluntad política.
En líneas generales, se trata de de sustituir los principios de máxima rentabilidad y máxima productividad por el de satisfacción de las necesidades humanas con la mínima extracción de materias primas y generación de residuos. Para ello, se pone el foco en el empleo. Se propone la creación de puestos de trabajo en sectores necesarios para el mantenimiento de la vida en el planeta (transición energética, gestión forestal, gestión de residuos urbanos) y una reconversión en sectores altamente contaminantes (automoción y turismo). Resultado de esta propuesta se prevé la creación de más de medio millón de empleos.
Esta transición, pensada a largo plazo, se centra en cinco ejes:
- Transición energética: es necesario, primeramente, una reducción del consumo de energía mediante el paso a una economía de cercanía, la desaparicón o reducción de determinadas ramas industriales que no son necesarias para el mantenimiento de la vida y una apuesta decidida por la agroecología. Asimismo, se plantea un sector energético 100% renovable.
El paso a una producción energética sostenible precisa de la desmantelación de las centrales térmicas y nucleares, la sustitución de los aparatos que funcionan con energías fósiles y un aumento de la producción energética de biomasa, hidráulica, solar y eólica. Todo esto podría generar la creación de entre 500.000 y 750.000 empleos directos.
- Gestión forestal: se plantea reforestar seis millones de hectáreas, también en zonas urbanas. Lo cual crearía, teniendo en cuenta los trabajos de mantenimiento y pevención, cerca de 70.000 puestos de trabajo.
- Gestión de residuos urbanos: si se aplicaran medidas de reciclaje efectivas, las cuales bloquea Ecoembes, se generaría un aumento de en torno a 17.000 puestos de trabajo, entre empleos directos e indirectos.
- Automoción: se propone una reducción de horas de trabajo que oscilaría entre el 53y el 81% con respecto al 2019. Además, las horas de trabajo se invertirían en la fabricación de vehículos de uso colectivo, así como en la producción de un parque móvil de uso compartido.
- Turismo: se plantean una serie de medidas para su reconversión: desplazamientos a cortas distancias y por medios de transporte público, una gestión de residuos adecuada, un menor consumo de recursos, para lo que un correcto aislamiento de los hospedajes sería necesario, estancias largas frente a las cortas, ya que tienen menos impacto, hospedajes menos lujosos...
De todas maneras, hay que reducir el número de puestos de trabajo en el sector, los cuales podrían emplearse en la transformación de grandes estructuras turísticas (aeropuertos, campos de golf, grandes urbanizaciones residenciales...), en desuso por la bajada del turismo, en espacios agrarios o forestales. También es un nicho de empleo la adaptación de los hospedajes a condiciones ambientales más sostenibles.
Existen alternativas a esta sociedad, caminemos hacia ellas.
Más información:
El Salto: Transición ecosocial y empleo
Informe: Empleo y Transición Ecosocial.