Desde ACEM, llevamos años alertando del uso masivo e insostenible que se está produciendo en el tramo medio del río Cabriel y en el río Júcar, por parte de empresas de turismo activo. Por ello en repetidas ocasiones hemos solicitado a las Administraciones implicadas (Confederación Hidrográfica de Júcar, y las Consejerías con competencias en Medio Ambiente de la Comunidad Valenciana y de Castilla la Mancha) que se determine la capacidad de los ríos de nuestra comarca para acoger estas actividades sin comprometer sus valores naturales, que se limiten en épocas sensibles, se controle adecuadamente el cumplimiento de las normativas, y por último se enfoquen prioritariamente a la sensibilización y conocimiento del medio natural.
Este vídeo, de la zona de Tamayo, es una muestra de la desmesura de estas actividades.