La palabra “anfibio” significa que vive en dos elementos, el medio acuático y el terrestre. Los adultos se desligan del agua en mayor o menor medida según la especie, aunque necesiten volver a ella para completar su ciclo biológico, para reproducirse. Los medios acuáticos en los que se reproducen son muy variados, desde charcas estacionales, fuentes, albercas y acequias hasta ramblas y ríos, teniendo cada especie sus preferencias. Su vida se divide en dos etapas bien diferenciadas, una larvaria, acuática, y la adulta, tras completarse la metamorfosis, más o menos terrestre según la especie.
Los anfibios presentes en nuestro territorio forman parte de dos grupos, anuros y urodelos.
Coincide con las épocas de lluvias, otoño y primavera, dependiendo de las distintas especies. Recorren en algunos casos largas distancias para acudir a las zonas de cría, que suelen ser los mismos ecosistemas acuáticos en los que pasaron su etapa larvaria, creando para ello mapas de memoria. Se reúnen en gran número en los años propicios, cantando los machos para atraer a las hembras, y compitiendo para conseguir aparearse. Los machos desarrollan excrecencias córneas en la cara interna de los brazos para agarrar a las hembras firmemente y en algunas especies sacos vocales para amplificar los cantos. La fecundación es externa, el macho agarra a la hembra mediante un abrazo llamado amplexus; si es bajo los brazos de la hembra sería axilar y si es sobre las patas se llama lumbar. En esta postura, conforme la hembra libera los huevos el macho los va fecundando.
Los urodelos no cantan, y su reproducción es también externa, pero en su caso el macho produce un paquete llamado espermatóforo que la hembra recoge y almacena, usandolo en el momento propicio. Mención aparte merecen los sapos parteros, ya que el macho recoge, transporta y mantiene (remojando) los huevos hasta el momento de la eclosión.
Las características útiles para la diferenciación son variadas:
El aspecto general del cuerpo encuadra a los anuros en dos tipos morfológicos (no sistemáticos):
Para diferenciarlos se atiende a las siguientes características: