En las últimas décadas, como consecuencia del aumento del uso del agua en diferentes actividades humanas, se han visto afectados diferentes espacios del agua de la zona. Los bombeos de agua subterránea en el acuífero de La Mancha Oriental han provocado un descenso de los niveles piezométricos y una pérdida en la interrelación entre los flujos de aguas subterráneas y superficiales que definían en la zona un patrimonio natural único.
Dicha afección ha tenido lugar tanto en los cauces principales de los ríos Júcar y Cabriel como en toda la red de regueros, fuentes, manantiales, arroyos y humedales que nacían en el entorno de los primeros y a donde vertían en última instancia.
El estudio se presenta para saber en qué situación se encuentran estas masas de agua y la brecha que nos separa del objetivo de alcanzar un estado saludable tanto en las aguas superficiales como en las subterráneas.
Como objetivos específicos se trata de visitar buena parte de las fuentes inventariadas así como describir pormenorizadamente 75 fuentes seleccionadas en lo que se refiere a su funcionamiento hidrológico, al estado de su biodiversidad y a los usos humanos actuales y pasados.